a todos aquellos que han perdido a un ser querido...
- Laura, mamá ha muerto. - ¿Ha muerto? - Se ha ido. - ¿A dónde? - Lejos. Al cielo. - ¿Al cielo? Quiero ir a verla abuelo. - El cielo está muy alto princesa, y nosotros no podemos volar.
Laura dirigió sus sollozantes ojos hacia las nubes.
- - Quería que guardaras para siempre uno de sus besos – su abuelo le entregó un trozo de papel con una marca de pintalabios. - ¿Por qué se ha ido? - Cariño, ella no se quería ir. Siempre estará contigo. - Pero, yo también quiero darle un beso abuelo. - Algún día se lo darás mi vida. - Pero ¿cuándo? - Algún día…
Sin embargo la ausencia de su madre, y la idea de no poder verla o hablar con ella, le producía una enorme tristeza y rompió en un llanto desconsolado.
Pero Laura, había aprendido de su madre que nunca había que rendirse, que siempre había alguna manera de alcanzar las cosas: “con imaginación, puedes conseguir lo que desees Laura, no lo olvides” le solía decir.
Entonces Laura recordó que una vez vio una película de náufragos, en la que metían un trocito de papel con un mensaje en una botella. Su madre le dijo que ese mensaje contenía la esperanza.
- - ¿y qué es la esperanza mamá? - La esperanza es el único camino del ser humano para alcanzar aquello que parece imposible.
Era domingo, y como cada domingo el abuelo Laura la llevó al parque. A Laura le encantaba ver los patos en el lago, las marionetas, los mimos… “seguro que eso la anima” pensó el abuelo. Cogida de la mano de su abuelo, Laura parecía ausente a todo aquello que normalmente le fascinaba, con la mirada perdida, como buscando algo que no encontraba. Entonces vio al vendedor de globos y su cara se transformó.
- - Abuelo, quiero un globo. - ¿Quieres un globo princesa? - Si abuelito, cómprame un globo. - ¿Cuál quieres? - Ese – dijo Laura señalando un globo de color rojo brillante con forma de corazón.
- - Sujétalo abuelo
- - Ayúdame abuelo.
- - Te quiero Mamá. – dijo con una sonrisa mirando al cielo
Entonces el corazón de Laura se perdió entre una de las nubes que dibujaba una dulce sonrisa.
muy buena mario
ResponderEliminarma mola la historia del globo, y los demas post tb
gracias me alegro! hay un buzón de sugerencias para comentar cualquier cosa, nueva sección u otras cosas!! Saludos
ResponderEliminarpor cierto, quiero recordar que las entradas que son hechas por mi las firmo con Maralcán, por ejemplo esta del globo, vi su historia navegando por la red, y ya luego yo le di forma con imágenes!!! para que quede todo claro!! saludos
ResponderEliminarBuenas noches Mario.
ResponderEliminarGracias por hacerte eco de esta preciosa historia. La escribí por la memoria de alguien especial que murió, y es de las que he escrito con mayor sentimiento, y por tanto de las que más cariño le tengo.
Me alegra que hayas aclarado que no eres el autor, ya que hay algunos que basan su creatividad en el corta y pega.
Espero que no te importe que ponga el enlace a la entrada original. http://maestro-de-nada.blogspot.com/2010/12/amor-infinito.html
Un cordial saludo
Acabo de leer tu comentario después de mucho mucho tiempo.. casi 2 años. Mejor tarde que nunca. Pues síii aclaré eso como cuando empecé con el blog y tenía de fongo a Pablo Alborán. El no era conocido entonces y como yo tenía una imágen fotos con mi guitarra pensaban que era mía las canciones. Ojalá.. pero el genio es Pablo Alborán.. así explicaba..
ResponderEliminarAquí tb dejé ese comentario por tu gran historia. Es super emocionante. Gracias por brindarnos textos así.
Y por supuesto no me molestó nada que colocaras el enlace de la entrada original, es decir la tuya =)
Lo que yo escribo lo firmo al final, lo que no está firmado son textos que me han gustado. La pena es que como hay tanto corta y pega.. muchas veces no sabes quién es el autor, pues aparece en muchos blog.
Un saludo y Enorabuena por el blog =)